A medida que la población envejece y aumentan las tasas de enfermedades crónicas, más personas deben gestionar múltiples pastillas para diversas afecciones a diario. Estos regímenes complejos de medicación pueden ser una molestia e incluso peligrosos si se comete un error, especialmente para quienes tienen deterioro cognitivo. Imagine la comodidad y seguridad de tomar solo una pastilla al día que administre todos los medicamentos necesarios en los momentos y dosis adecuadas.
El concepto de polipíldoras
Las pastillas suelen funcionar liberando los fármacos en el cuerpo cuando su cubierta exterior se disuelve en el sistema digestivo. Sin embargo, una pastilla diseñada de manera inteligente puede contener múltiples capas, cada una con un medicamento diferente. A medida que cada capa se disuelve a una velocidad específica, libera su fármaco de forma secuencial hasta que la pastilla se absorbe por completo. Estas ‘polipíldoras’ ya se están fabricando para afecciones como la diabetes tipo 2, la hipertensión y las enfermedades del corazón.
Medicamentos personalizados mediante impresión 3D
Aunque la producción masiva de polipíldoras es factible, presenta un desafío: una sola combinación de medicamentos puede no ser adecuada para todos los pacientes. Las polipíldoras personalizadas, adaptadas a las necesidades individuales, resultan costosas cuando se producen con técnicas tradicionales. Aquí entra la impresión 3D, una solución rentable que construye capas delgadas de material para crear el producto final. Esta tecnología permite la personalización de polipíldoras para cada paciente.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA) ya ha aprobado un medicamento impreso en 3D, aunque no es una polipíldora. Aun así, esta aprobación allana el camino para más avances en este campo. Sin embargo, muchos medicamentos no son solubles en agua, lo que supone un reto para la impresión 3D. La absorción eficiente de estos fármacos requiere nuevos materiales y métodos.
Avances en la administración de medicamentos impresos en 3D
Investigaciones recientes se han centrado en el uso de ‘complejos de tensioactivos-polielectrolitos’ para la impresión 3D de medicamentos. Estos materiales—geles compuestos principalmente de agua—pueden transportar fármacos insolubles en agua. Los tensioactivos, que tienen partes que se mezclan con el agua y partes que no, pueden formar estructuras para almacenar medicamentos. Cuando se combinan con polielectrolitos de carga opuesta, forman un complejo capaz de administrar los fármacos de manera eficaz.
Mediante la impresión 3D de capas alternas de estos materiales, los investigadores han desarrollado un sistema capaz de almacenar y liberar moléculas de medicamentos en forma de polipíldora. Esta innovación podría revolucionar la forma en que se administran los medicamentos, especialmente para quienes padecen múltiples afecciones.
El futuro de la gestión de medicamentos
Aunque esta nueva forma de administración de fármacos muestra un gran potencial, aún requiere la aprobación regulatoria, lo que puede tardar hasta cinco años después de los ensayos clínicos. En un futuro cercano, las polipíldoras personalizadas impresas en 3D podrían estar disponibles en farmacias locales, simplificando los horarios de medicación para muchos.
Este avance en la tecnología de impresión 3D tiene el potencial de transformar la atención médica, haciendo que la gestión de medicamentos sea más segura, conveniente y personalizada.
Referencias:
The Conversation: Los medicamentos impresos en 3D podrían ser una bendición para quienes toman varias pastillas al día – y potencialmente salvar vidas
The Optimist Daily: La polipíldora impresa en 3D cubre toda tu medicación para el día
Forbes: La FDA aprueba el primer medicamento impreso en 3D
The Medical Futurist: El futuro de los medicamentos impresos en 3D en farmacias está más cerca de lo que piensas
